En un ambiente cargado de tensión y acusaciones, el ministro de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, compareció ante la comisión del Senado que investiga las irregularidades en el Ministerio de Transportes durante la gestión de José Luis Ábalos. López, quien fue presidente de Paradores entre 2018 y 2021, se defendió de las acusaciones sobre fiestas que supuestamente se llevaron a cabo en la empresa pública durante la pandemia, afirmando que nunca tuvo conocimiento de tales eventos.
### La defensa de Óscar López
Durante su intervención, López enfatizó que no había escuchado ni un solo rumor sobre las fiestas en cuestión. “Ni un cotilleo, ni un rumor”, reiteró en varias ocasiones, subrayando su postura de que no era razonable que se le citara para discutir chismes en un contexto político tan serio. Aseguró que, tras dejar su cargo en Paradores, una periodista le preguntó sobre las fiestas, y al consultar a su antiguo equipo, le confirmaron que no había constancia de ningún evento de ese tipo.
El ministro no solo defendió su inocencia, sino que también criticó la tendencia de algunos políticos a convertir la política en un “lodazal”. Su respuesta fue clara: no se debe trivializar la política con rumores infundados. Esta defensa, sin embargo, no impidió que la sesión se tornara más intensa, especialmente cuando se abordaron otros temas relacionados con la política madrileña.
### Acusaciones cruzadas y el papel del PP
Uno de los momentos más tensos de la comparecencia se produjo cuando el senador del PP, Alfonso Serrano, cuestionó a López. En un intercambio acalorado, López acusó a Serrano de reunirse con personas implicadas en delitos, refiriéndose a su encuentro con Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Este encuentro se produjo horas después de que González Amador se querellara contra la Fiscalía por revelación de secretos.
López no se contuvo y utilizó la frase “Coca Cola para todos y algo de comer” para referirse a la fotografía que se tomó con Serrano durante su encuentro, lo que provocó una serie de réplicas entre ambos. La discusión se centró en la obsesión que, según Serrano, tenía López por Ayuso y su pareja, mientras que López replicó que era Serrano quien traía a colación temas ajenos a la investigación en curso.
El ambiente se volvió aún más hostil cuando el senador de Vox, Ángel Pelayo Gordillo, se unió a la discusión, cuestionando la capacidad de comprensión de López. A pesar de los insultos y las acusaciones, López mantuvo su postura y continuó defendiendo su inocencia y la de su equipo.
### Contexto de la investigación
La comparecencia de López se enmarca en una serie de investigaciones sobre la gestión de Ábalos y las irregularidades que se habrían producido en el Ministerio de Transportes. Las acusaciones de fiestas en Paradores durante la pandemia han generado un gran revuelo mediático y político, y la comisión del Senado busca esclarecer los hechos.
La situación es particularmente delicada, dado que la pandemia trajo consigo una serie de restricciones y medidas de austeridad que afectaron a la población. Las supuestas fiestas en un entorno público como Paradores, que debería haber estado alineado con las políticas de salud pública, son vistas como un acto de irresponsabilidad.
López, al ser cuestionado sobre su papel en la gestión de Paradores, se defendió argumentando que su administración se centró en la recuperación de la empresa y en garantizar su sostenibilidad durante tiempos difíciles. Sin embargo, la sombra de las acusaciones persiste, y la presión sobre él y su equipo aumenta a medida que avanza la investigación.
### Reacciones y repercusiones
Las reacciones a la comparecencia de López no se han hecho esperar. Desde diferentes sectores políticos, se han expresado opiniones encontradas. Algunos apoyan la postura del ministro, argumentando que es injusto que se le acuse sin pruebas concretas, mientras que otros consideran que su defensa es insuficiente y que debe asumir responsabilidades por lo que ocurrió durante su gestión.
La situación en el Senado refleja la polarización política actual en España, donde las acusaciones de corrupción y mala gestión son moneda corriente. La comparecencia de López es solo un capítulo más en una saga que parece no tener fin, y que seguirá generando debate y controversia en el ámbito político y social del país.
A medida que la investigación avanza, será crucial observar cómo se desarrollan los acontecimientos y qué implicaciones tendrá para los involucrados, así como para la imagen del gobierno en su conjunto.