La reciente venta de la filial de Telefónica en Uruguay a Millicom Spain por 440 millones de dólares marca un hito significativo en la estrategia de desinversión de la compañía en Hispanoamérica. Este movimiento, anunciado a través de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, se enmarca dentro de un plan más amplio de la empresa para reducir su exposición en la región y fortalecer su posición en el mercado europeo.
La transacción, que representa el 100% de las acciones de Telefónica Móviles del Uruguay, está sujeta a la aprobación de las autoridades regulatorias, a diferencia de las ventas recientes de sus filiales en Argentina y Perú, que se concretaron de inmediato. Este enfoque más cauteloso en Uruguay refleja la importancia de cumplir con los requisitos legales y regulatorios en el proceso de desinversión.
**Desinversiones Estratégicas en Hispanoamérica**
Telefónica ha estado en un proceso de reestructuración que ha incluido la venta de sus operaciones en varios países de Hispanoamérica. En febrero, la compañía vendió su filial en Argentina a Telecom Argentina por aproximadamente 1.190 millones de euros. Esta operación tuvo un impacto significativo en los resultados financieros de Telefónica, con un efecto contable de alrededor de 1.200 millones de euros en el primer trimestre del año. Asimismo, la venta de su subsidiaria en Perú a Integra Tecc International por 900.000 euros también afectó las cuentas de la empresa, sumando un impacto total de 1.731 millones de euros en pérdidas netas de 1.304 millones de euros en el mismo periodo.
La estrategia de desinversión no solo se limita a Uruguay, Argentina y Perú. Telefónica también ha vendido su filial en Colombia a Millicom por aproximadamente 368 millones de euros, aunque esta operación aún no se ha cerrado. Estas decisiones reflejan un enfoque más amplio de la compañía para optimizar su cartera de activos y concentrarse en mercados donde tiene una mayor presencia y potencial de crecimiento, como Europa.
**Fortaleciendo la Presencia en Europa**
El presidente de Telefónica, Marc Murtra, ha destacado que la reducción de la exposición a Hispanoamérica permitirá a la empresa mejorar su posición para realizar operaciones de consolidación en el sector de telecomunicaciones en Europa. Con tres de sus cuatro principales mercados (España, Alemania y Reino Unido) ubicados en este continente, Telefónica busca utilizar los recursos liberados de las desinversiones para invertir en oportunidades más rentables y estratégicas.
Murtra ha señalado que, aunque estas decisiones pueden parecer contraintuitivas, son necesarias para utilizar el capital de manera más eficiente. La realidad económica en Hispanoamérica, donde la generación de caja ha sido un desafío, ha llevado a la empresa a revaluar su enfoque y priorizar mercados con un entorno más favorable para el crecimiento.
Por su parte, Millicom, que opera principalmente bajo la marca Tigo, ha expresado su entusiasmo por la adquisición de la filial uruguaya de Telefónica. La empresa espera que esta transacción no solo le permita expandir su presencia en Sudamérica, sino que también genere un impacto positivo en su flujo de caja libre a partir de 2026. Millicom ha destacado que la operación proporcionará beneficios inmediatos de escala y sinergias operativas con sus operaciones existentes en Paraguay y Bolivia.
El CEO de Millicom, Marcelo Benítez, ha enfatizado la importancia de esta adquisición en su estrategia de crecimiento en Latinoamérica, subrayando el compromiso de la empresa con el desarrollo digital de Uruguay. La compañía planea invertir en infraestructura móvil y mejorar la calidad del servicio, lo que beneficiará tanto a los consumidores como a la economía local.
En resumen, la venta de la filial de Telefónica en Uruguay es un paso más en la reestructuración de la compañía, que busca optimizar su presencia en mercados más rentables y estratégicos. A medida que Telefónica se aleja de Hispanoamérica, se enfoca en fortalecer su posición en Europa, donde espera aprovechar las oportunidades de consolidación en un sector altamente competitivo. La transacción con Millicom no solo representa un cambio en la propiedad de la filial uruguaya, sino también un movimiento estratégico que podría redefinir el panorama de las telecomunicaciones en la región.