La reciente edición de ‘La Desértica’, una de las pruebas más emblemáticas del calendario deportivo de Ceuta, ha dejado huella no solo por la participación masiva de corredores, sino también por las historias personales que se entrelazan en cada carrera. Entre los competidores, destaca la figura de María Mosquete, una atleta ceutí afincada en Almería, quien ha logrado un notable segundo puesto en la categoría de Veteranos. Más allá de su éxito deportivo, la historia de María es un homenaje a su padre, un legionario fallecido que ha sido su inspiración constante.
La prueba de ‘La Desértica’, que este año alcanzó su séptima edición, reunió a aproximadamente 7.300 participantes. Organizada por el Tercio Juan de Austria 3º de la Legión, esta carrera se ha convertido en un evento significativo para la comunidad local, donde los corredores no solo compiten, sino que también celebran la camaradería y el espíritu de superación. En esta ocasión, además de María Mosquete, otros atletas como la teniente María Romero y Elena López también se destacaron en sus respectivas categorías, contribuyendo a un ambiente de competencia saludable y motivador.
### Un Homenaje a un Legionario
La historia de María Mosquete es particularmente conmovedora. Desde que su padre, un legionario destinado en el Tercio Duque de Alba 2º, falleció hace dieciocho años debido a un tumor cerebral, María ha encontrado en el running una forma de mantener viva su memoria. Su padre había estado preparándose para participar en una carrera en el Sáhara cuando la enfermedad lo sorprendió. Este trágico evento marcó un antes y un después en la vida de María, quien decidió honrar su legado a través del deporte.
“Yo corro representando a mi padre, más que nada. Estuvo en el segundo Tercio, y luego le destinaron a Almería”, comenta María, quien lleva siempre consigo una foto de su padre durante las competiciones. Esta imagen no solo le sirve como un recordatorio de su legado, sino que también actúa como un motor que la impulsa a cruzar la línea de meta. “Llevo la foto puesta siempre, y en el podio también la llevaba”, añade con emoción.
La conexión de María con Ceuta es profunda, a pesar de haber vivido en Almería desde 1996. Ella se siente caballa y representa a su ciudad natal en cada carrera. Su participación en ‘La Desértica’ no es solo una cuestión de competencia, sino un acto de amor y recuerdo hacia su padre, quien le inculcó valores de esfuerzo y dedicación.
### La Importancia de ‘La Desértica’
‘La Desértica’ no es solo una carrera; es un evento que simboliza la unión y el orgullo de la comunidad ceutí. La prueba, que incluye diferentes categorías, permite a los corredores de todas las edades y niveles de habilidad participar y disfrutar de un día lleno de actividad física y camaradería. La organización del Tercio Juan de Austria 3º de la Legión ha logrado crear un ambiente donde el deporte y la tradición se entrelazan, haciendo de esta carrera un evento esperado cada año.
La participación de corredores de diversas partes del país, como es el caso de María Mosquete, resalta la relevancia de este evento en el ámbito deportivo nacional. Cada año, más personas se suman a la carrera, lo que refleja el creciente interés por el deporte y la cultura de la región. Además, la carrera también promueve valores como la solidaridad y el compañerismo, aspectos fundamentales en la vida de cualquier atleta.
El éxito de María Mosquete en esta edición de ‘La Desértica’ es un testimonio de su dedicación y amor por el deporte, así como de su deseo de mantener viva la memoria de su padre. Su historia inspira a otros a encontrar en el deporte una forma de superar adversidades y honrar a aquellos que han sido importantes en sus vidas. En cada zancada que da, María no solo corre por ella misma, sino también por su padre, convirtiendo cada carrera en un tributo a su legado familiar.