El nuevo Papa, León XIV, ha decidido retomar una tradición que había estado ausente durante el papado de Francisco: pasar sus vacaciones en Castel Gandolfo. Este verano, el Pontífice se tomará dos semanas de descanso en esta histórica residencia papal, donde podrá disfrutar de actividades recreativas como el tenis y la natación, pero también aprovechará para abordar cuestiones importantes que marcarán su papado.
### Un Regreso a Castel Gandolfo
Castel Gandolfo, un pintoresco pueblo a 25 kilómetros de Roma, ha sido el destino vacacional de varios Papas a lo largo de la historia. Sin embargo, desde que Francisco asumió el cargo, esta tradición se había interrumpido. León XIV, quien fue elegido Pontífice hace apenas dos meses, ha optado por un enfoque diferente al de su predecesor. En lugar de permanecer en Roma durante el verano, ha decidido trasladarse a Castel Gandolfo, donde no solo podrá descansar, sino también trabajar en varios asuntos cruciales.
La llegada de León XIV a Castel Gandolfo fue recibida con entusiasmo por los lugareños, quienes se volcaron a las calles para darle la bienvenida. A diferencia de Francisco, quien prefería no salir de la Ciudad Eterna, León XIV ha optado por un estilo más tradicional, que incluye saludar a la multitud desde el balcón de su residencia. Este gesto ha sido bien recibido, ya que muchos en la comunidad local ven en él un retorno a las costumbres papales más arraigadas.
### Asuntos Estratégicos en la Agenda Papal
A pesar de que León XIV se encuentra de vacaciones, su agenda está lejos de estar vacía. Durante su estancia en Castel Gandolfo, el Papa se centrará en tres cuestiones estratégicas que son fundamentales para su papado. La primera de ellas es la elaboración de un “documento programático” que podría ser presentado en otoño. Este documento no solo servirá como una lista de propuestas, sino que establecerá el marco teológico que guiará sus decisiones futuras.
León XIV ya ha comenzado a delinear las prioridades de su papado, las cuales fueron discutidas en una reunión con 400 obispos de todo el mundo. La unidad de la Iglesia es su principal preocupación, y el Papa ha enfatizado la importancia de fomentar el diálogo y la colaboración entre los diferentes ministerios de la Iglesia. En sus propias palabras, la unidad solo puede lograrse en torno a Cristo, y no a través de estrategias políticas o consensos superficiales.
La segunda cuestión en su agenda es la formación de su equipo de colaboradores. León XIV tiene la tarea de nombrar a un nuevo prefecto para el Dicasterio de los Obispos, un puesto que él mismo ocupaba antes de ser elegido Papa. Además, está considerando a posibles candidatos para el cargo de “Sustituto de la Secretaría de Estado”, quien actúa como enlace entre su oficina y la Curia Vaticana. La configuración de su equipo de comunicación también es una prioridad, ya que el Papa busca establecer un perfil claro para su papado.
Por último, León XIV está planificando sus primeros viajes como Pontífice. Desde junio, ha delegado esta tarea en el sacerdote mexicano José Salas Castañeda. Se espera que el Papa realice un viaje a Turquía a finales de noviembre para conmemorar el 1700 aniversario del Concilio de Nicea, un evento significativo en la historia de la Iglesia. También ha recibido invitaciones para visitar Perú y Chicago, lo que indica que su agenda internacional comenzará a tomar forma rápidamente.
A pesar de su apretada agenda, León XIV no se aislará completamente durante sus vacaciones. Tiene programadas varias misas en Castel Gandolfo y participará en actividades con peregrinos, manteniendo así un contacto cercano con la comunidad. Este equilibrio entre el descanso y el trabajo refleja su compromiso con su nuevo rol y su deseo de abordar los desafíos que enfrenta la Iglesia.
En resumen, León XIV está utilizando su tiempo en Castel Gandolfo no solo para relajarse, sino también para sentar las bases de su papado. Con un enfoque en la unidad de la Iglesia y la planificación de su equipo y viajes, el Papa está demostrando que su liderazgo será proactivo desde el principio. A medida que se prepara para su primer evento multitudinario, el Jubileo de los Jóvenes, que se llevará a cabo a principios de agosto, el mundo estará atento a cómo se desarrollan sus planes y prioridades en los próximos meses.