La situación en Gaza ha alcanzado niveles de desesperación y dolor inimaginables, especialmente para aquellos que han perdido a sus seres queridos en medio de la violencia. Duha Elsaife, una periodista de 33 años, es un claro ejemplo de la tragedia que se vive en esta región. Tras ser evacuada de Gaza junto a su hijo Saif, Duha se encuentra en Ammán, Jordania, donde intenta reconstruir su vida después de haber perdido a su familia en un bombardeo devastador.
### La tragedia personal de Duha Elsaife
Duha Elsaife es madre de cuatro hijos, de los cuales tres fueron asesinados en un ataque aéreo israelí en abril. La familia se había refugiado en una escuela, buscando seguridad durante un momento de celebración religiosa. Sin embargo, su búsqueda de protección se convirtió en una pesadilla cuando una bomba cayó sobre el lugar, llevándose la vida de sus hijos: Rital, de 13 años; Nour, de 10; y Osama, de solo 4 años. La madre, que también resultó gravemente herida, recuerda con dolor el momento en que se enteró de la muerte de sus hijos tras ser dada de alta del hospital.
“Fue a los seis días, al darme el alta en el hospital, cuando me enteré que mis hijos habían muerto. En ese momento di gracias a Dios porque ya no iban a sufrir más. No iban a pasar más hambre y más miedo”, relata Duha, con una voz que refleja la profunda tristeza y el sufrimiento que ha experimentado. Su historia es un recordatorio de la brutalidad del conflicto y de cómo afecta a las familias inocentes.
La habitación donde se encuentra Duha en Ammán está decorada con fotos de sus hijos fallecidos. Cada imagen es un recordatorio del amor y la alegría que una vez llenaron su hogar. A pesar de su dolor, Duha se esfuerza por mantener viva la memoria de sus hijos y por contar su historia al mundo. “Como periodista, mi objetivo es hacer llegar y contar al mundo entero toda la verdad de lo que está cometiendo Israel en Gaza. La masacre y la limpieza étnica en la Franja”, afirma con determinación.
### La lucha por la verdad en medio del dolor
Duha no solo es madre, sino también periodista. Desde joven, ha trabajado para varios medios de comunicación, documentando la ocupación y el sufrimiento del pueblo palestino. Sin embargo, la guerra ha cambiado su enfoque. Al principio del conflicto, continuó trabajando, pero a medida que la situación se volvió más peligrosa, decidió priorizar la seguridad de sus hijos.
La situación de los periodistas en Gaza es alarmante. En lo que va de conflicto, más de 190 periodistas han perdido la vida, muchos de ellos en ataques directos. Duha ha perdido a colegas y amigos, lo que ha intensificado su deseo de contar la verdad. “Me hice periodista porque me encantaba ese trabajo. Siempre he querido alzar la voz de mi pueblo y lo que sufre a través de los medios”, explica. A pesar de las dificultades, sigue documentando lo que sucede en su tierra a través de las redes sociales, buscando que el mundo no olvide la realidad que viven los palestinos.
El dolor que siente Duha es palpable, pero su determinación es aún más fuerte. A pesar de las cicatrices físicas y emocionales que lleva consigo, se niega a ser silenciada. “Es lo que nos toca hacer, tenemos que seguir contando al mundo lo que está pasando”, dice con firmeza. Su hijo Saif, el único que sobrevivió al ataque, es su mayor motivación. Duha espera que él tenga un futuro mejor, un futuro en el que puedan vivir sin miedo y con dignidad.
La historia de Duha Elsaife es un testimonio del sufrimiento humano en medio de la guerra, pero también es un símbolo de resistencia y esperanza. A pesar de la pérdida y el dolor, su voz sigue siendo un faro de verdad en un mundo que a menudo elige ignorar la realidad de Gaza. Su lucha por contar la historia de su pueblo es un acto de valentía que merece ser escuchado y apoyado. En un contexto donde la información es manipulada y silenciada, la voz de Duha se convierte en un grito de resistencia que resuena más allá de las fronteras de Gaza.