Un equipo internacional de astrónomos ha hecho un descubrimiento asombroso al confirmar el destello de energía más potente y distante jamás observado, proveniente de un agujero negro supermasivo. Este fenómeno, detectado inicialmente en 2018, ha sido catalogado como J2245+3743 y se localiza a 10.000 millones de años luz de la Tierra. La luminosidad del destello es equivalente a 10 billones de soles, lo que lo convierte en un evento sin precedentes en la historia de la astronomía. La investigación, liderada por Matthew Graham del Instituto de Tecnología de California (Caltech), ha sido publicada en la revista Nature Astronomy.
### La Destrucción de una Estrella Gigante
El fenómeno observado se atribuye a un evento de disrupción de marea (TDE, por sus siglas en inglés), un proceso en el que la gravedad de un agujero negro supermasivo desgarra una estrella que se acerca demasiado. En este caso, la estrella en cuestión tenía una masa al menos 30 veces superior a la del Sol, lo que representa un récord en comparación con otros eventos de disrupción de marea documentados hasta la fecha, que generalmente involucran estrellas mucho más pequeñas.
El brillo extraordinario del destello aumentó 40 veces en cuestión de meses, superando en 30 ocasiones la luminosidad de cualquier fulgor previo documentado en agujeros negros. Graham explica que las energías involucradas en este fenómeno son tan intensas que no se asemejan a ningún núcleo galáctico activo que se haya observado anteriormente. El agujero negro supermasivo en el centro de este evento tiene una masa estimada de 500 millones de veces la del Sol, lo que lo convierte en un objeto de estudio fascinante para los astrónomos.
La observación de este evento no solo es un hito en términos de luminosidad, sino que también plantea preguntas sobre la naturaleza de las estrellas gigantes en el universo. La existencia de una estrella tan masiva es inusual, y los investigadores sugieren que estas estrellas pueden crecer considerablemente al acumular materia del disco que rodea un núcleo galáctico activo. Esto podría significar que eventos de disrupción de marea de esta magnitud podrían ser más comunes de lo que se pensaba anteriormente, aunque su detección sigue siendo un desafío.
### La Importancia de la Observación Prolongada
La distancia extrema del evento J2245+3743 presenta características únicas para su observación. Debido a que la luz viaja a una velocidad finita, los astrónomos están observando el fenómeno tal como ocurrió cuando el universo tenía apenas una cuarta parte de su edad actual. Este fenómeno se conoce como dilatación temporal cosmológica, donde el tiempo transcurre de manera diferente a esa distancia. Graham explica que siete años en la Tierra equivalen a dos años en el lugar donde ocurrió el evento, lo que significa que están observando el evento reproducirse a una cuarta parte de su velocidad.
La importancia de estudios prolongados como los realizados por el Zwicky Transient Facility (ZTF) y el Catalina Real-Time Transient Survey es fundamental para la comprensión de fenómenos como este. Ambos proyectos, financiados por la Fundación Nacional de Ciencia de Estados Unidos, han seguido el fenómeno durante años, lo que ha permitido a los investigadores observar su comportamiento y evolución a lo largo del tiempo. Este enfoque ha sido crucial para confirmar la naturaleza extrema del destello y descartar otras hipótesis que podrían haber explicado el brillo observado.
El descubrimiento inicial en 2018 no reveló características inusuales, lo que llevó a los científicos a realizar un análisis más profundo. A medida que el destello comenzó a decaer más lentamente de lo esperado, se llevaron a cabo nuevas observaciones con el Observatorio W. M. Keck en Hawái. La coautora del estudio, K. E. Saavik Ford, enfatiza la importancia de establecer que este objeto extremo era verdaderamente tan brillante y no una ilusión óptica. Los investigadores utilizaron datos de la misión Wide-field Infrared Survey Explorer (WISE) de la NASA para descartar otras explicaciones, como la explosión de una supernova cercana.
La magnitud de la energía emitida por el destello es asombrosa. Ford señala que si se convirtiera todo nuestro Sol en energía utilizando la famosa fórmula de Einstein E=mc², esa sería la cantidad de energía que ha estado emanando este destello desde que comenzaron a observarlo. Este descubrimiento no solo desafía las expectativas sobre la naturaleza de los agujeros negros supermasivos, sino que también abre nuevas vías para la investigación en el campo de la astrofísica.
La existencia de estrellas tan masivas y su relación con los agujeros negros supermasivos plantea interrogantes sobre la formación y evolución de las galaxias. A medida que los astrónomos continúan explorando el universo, el Observatorio Vera C. Rubin, actualmente en desarrollo, podría ayudar a identificar fenómenos similares en el futuro. Este observatorio tiene el potencial de revolucionar nuestra comprensión de los eventos transitorios en el cosmos y contribuir a la detección de eventos de disrupción de marea de gran magnitud.
El descubrimiento del destello J2245+3743 es un recordatorio de la complejidad y belleza del universo. A medida que los científicos continúan investigando estos fenómenos, se espera que se revelen más secretos sobre la naturaleza de los agujeros negros supermasivos y su interacción con las estrellas en su entorno. La astronomía sigue siendo un campo en constante evolución, y cada nuevo hallazgo nos acerca un paso más a comprender los misterios del cosmos.
