La situación de las 65 familias que residen en el bloque de viviendas de Pasaje Trujillo en Ceuta ha alcanzado un punto crítico. Desde 2010, estos vecinos han enfrentado problemas severos de filtraciones y humedades que han afectado gravemente su calidad de vida. A pesar de que en diciembre de 2022 se realizaron algunas reparaciones, los daños persistentes han llevado a los residentes a considerar protestas ante el Gobierno local en busca de una solución definitiva.
### Un Problema que Se Arrastra desde Hace Años
La historia de esta crisis habitacional comienza en 2010, cuando los residentes comenzaron a notar problemas de inundaciones en sus viviendas, específicamente la entrada de aguas fecales. A lo largo de los años, las quejas se han acumulado, y en octubre de 2022, los vecinos decidieron hacer públicas sus circunstancias tras la falta de respuesta por parte de las autoridades. La intervención de diciembre de 2022 trajo consigo algunas mejoras, pero no resolvió el problema de raíz.
Pedro Hoyos, presidente de la comunidad de vecinos, ha expresado su frustración ante la situación. Aunque reconoce que la situación ha mejorado en comparación con hace quince años, los problemas de filtraciones y humedades siguen afectando a los residentes. “Los coches nuevos están todos llenos de cal. Los techos están iguales. Esto es de vergüenza”, afirma Hoyos, quien también menciona que algunos vecinos han tomado la iniciativa de colocar canaletas para mitigar el problema, aunque estas soluciones improvisadas son solo parches temporales.
La comunidad ha intentado comunicarse con Emvicesa, la empresa municipal encargada de la gestión de viviendas, pero hasta ahora solo han recibido promesas sin acciones concretas. “Esto ya no puede ser. Es un asunto que se ha demorado en el tiempo. La propiedad no está bien. Es un caramelo envenenado”, comenta un vecino afectado, reflejando el sentimiento de impotencia que predomina entre los residentes.
### La Resistencia de los Vecinos
A medida que la situación se ha vuelto insostenible, los vecinos han comenzado a organizarse para llevar sus quejas a un nivel superior. La idea de protestar ante las puertas del Palacio autonómico ha cobrado fuerza, ya que sienten que su voz ha sido ignorada durante demasiado tiempo. La comunidad está decidida a hacer que sus problemas sean escuchados y a exigir una solución definitiva.
La indignación de los residentes se ve alimentada por el deterioro continuo de sus viviendas. Las filtraciones no solo afectan a los garajes y trasteros, sino que también amenazan la estructura del edificio. “No puedo meter cajas de la ropa dentro porque, al final, se apulgará y la tengo que tirar. Se ha caído por la humedad la parte de madera de un mueble que estaba colgado en la pared”, relata uno de los vecinos, quien ha visto cómo sus pertenencias se deterioran a causa de la falta de atención por parte de las autoridades.
La comunidad ha intentado resolver el problema de manera individual, pero la falta de recursos y apoyo ha hecho que sus esfuerzos sean en vano. “Hicieron una obra de envergadura. Abrieron toda la calle de atrás. Los tubos estaban rotos”, explica Hoyos, refiriéndose a las reparaciones realizadas en diciembre de 2022. Sin embargo, los problemas de filtraciones persisten, y los residentes sienten que la responsabilidad recae en el edificio y no en ellos.
La situación ha llevado a un estado de desesperación entre los vecinos, quienes sienten que su bienestar y seguridad están en juego. La falta de acción por parte de las autoridades ha dejado a los residentes con pocas opciones, y la protesta se presenta como una de las pocas alternativas que les queda para ser escuchados.
Los vecinos de Pasaje Trujillo no solo luchan por la reparación de sus viviendas, sino también por el reconocimiento de sus derechos como ciudadanos. La crisis habitacional en Ceuta es un reflejo de problemas más amplios que afectan a muchas comunidades en la región, donde la falta de atención a las necesidades de los ciudadanos puede llevar a situaciones insostenibles. La lucha de estos vecinos es un llamado a la acción para que las autoridades tomen en serio las necesidades de sus ciudadanos y trabajen para garantizar un hogar seguro y saludable para todos.