El presidente de BBVA, Carlos Torres, ha compartido su perspectiva sobre la oferta pública de adquisición (OPA) que su banco ha presentado para Banco Sabadell, justo antes de que el Consejo de Ministros tome una decisión crucial al respecto. En un evento reciente en Santander, Torres destacó que el Gobierno no tiene la autoridad legal para endurecer las condiciones previamente establecidas por la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), las cuales ya fueron aceptadas por Sabadell. Este proceso, que se ha dado en pocas ocasiones en la historia, se convierte en un punto focal para los accionistas y la dirección del banco.
La OPA ha estado en el aire durante más de 13 meses, lo que ha generado una notable incertidumbre entre los accionistas de Sabadell. Torres enfatizó que es el momento de que los accionistas tomen la decisión sobre su futuro, y expresó su confianza en que el resultado será favorable. “No tengo temor respecto a la decisión gubernamental; confío en que ocurrirá lo que tiene sentido”, afirmó. Sin embargo, también criticó la prolongación del proceso, señalando que la espera ha sido más larga de lo esperado y que esto podría afectar la confianza de los inversores.
### La Venta de TSB y sus Implicaciones
Uno de los puntos más controvertidos en la conversación sobre la OPA es la posible venta de TSB, la filial británica de Banco Sabadell. Torres calificó esta operación como “confusa” y admitió que tiene “muy poca información” sobre el proceso. A pesar de que la venta de TSB podría influir en la OPA, Torres aclaró que legalmente no se pueden modificar las condiciones de la oferta debido a esta circunstancia. Solo en caso de que Sabadell decidiera repartir dividendos por la venta, la oferta podría ajustarse a la baja. En cualquier otro escenario, las opciones legales para BBVA serían mantener la OPA en sus términos actuales o desistir.
El presidente de BBVA también expresó su preocupación por el momento elegido para llevar a cabo la venta de TSB. “No es el momento idóneo para lanzar una operación de este tipo”, argumentó, sugiriendo que las decisiones de los administradores no deberían interferir en los derechos de los accionistas. La posibilidad de desistir de la OPA está sobre la mesa, especialmente si se imponen condiciones que no se alinean con lo que la ley permite o si se vende un activo significativo de Sabadell.
### Expectativas y Procedimientos Legales
A pesar de los desafíos, BBVA mantiene su intención de seguir adelante con la OPA, confiando en el apoyo de sus accionistas. Torres admitió que, si el Gobierno decide endurecer las condiciones, la entidad podría considerar la opción de desistir. “Veremos qué escenario se materializa y qué decisión toma el banco”, comentó, dejando claro que la incertidumbre sigue presente.
La CNMV, por su parte, ha anunciado que planea suspender temporalmente las cotizaciones de ambos bancos antes de que se haga pública la decisión del Consejo de Ministros. Esta medida busca evitar cualquier tipo de volatilidad en el mercado. Carlos San Basilio, presidente de la CNMV, explicó que la suspensión se llevará a cabo de manera “quirúrgica” para asegurar que la información se maneje de forma adecuada y no se generen especulaciones que puedan afectar el funcionamiento del mercado.
Además, San Basilio subrayó que el consejo de administración de Sabadell debe cumplir con su “deber de pasividad” en relación con la venta de TSB, lo que significa que no deben intervenir activamente en el proceso de compra. En caso de que la junta de accionistas de Sabadell apruebe la venta de TSB, la CNMV no consideraría que se incurre en un incumplimiento, siempre que se sigan los procedimientos adecuados.
La CNMV también ha indicado que, si la venta de TSB se lleva a cabo durante el periodo de aceptación de la OPA, se requerirá un suplemento del folleto que contemple esta transacción, siempre y cuando BBVA no decida desistir de su oferta. La entidad reguladora espera tener listo el folleto de la OPA en aproximadamente tres semanas, dependiendo de la decisión del Consejo de Ministros.
En este contexto, la situación se mantiene en un estado de expectativa, donde tanto BBVA como Banco Sabadell se preparan para lo que podría ser un cambio significativo en el panorama bancario español. La OPA de BBVA no solo representa una oportunidad de expansión para el banco, sino que también plantea una serie de desafíos legales y estratégicos que deberán ser cuidadosamente gestionados en los próximos días.