Un paseo cotidiano se convirtió en una experiencia traumática para Sakina M. T., una joven madre de 25 años, quien sufrió un accidente al pisar una alcantarilla en mal estado en la zona de la Almadraba, Ceuta. Este incidente, que ocurrió el pasado martes alrededor de las 13:00 horas, resalta la importancia de la infraestructura urbana y la necesidad de un mantenimiento adecuado para prevenir accidentes que pueden tener consecuencias graves.
### El accidente y sus consecuencias
Sakina, madre de dos niños pequeños de 2 y 3 años, se encontraba saliendo de una farmacia cuando, al pisar la tapa de una alcantarilla, esta se levantó repentinamente, atrapando su pie y provocando una caída aparatosa. Como resultado, sufrió varias lesiones, incluyendo puntos de sutura en la rodilla, así como lesiones en el tobillo izquierdo y en la mano que utilizó para intentar amortiguar la caída. Los servicios de emergencias del 112 llegaron rápidamente al lugar y la trasladaron al hospital para recibir atención médica.
La joven relató que, afortunadamente, su juventud le jugó a favor, ya que los sanitarios que la atendieron comentaron que, de haber sido una persona mayor, las consecuencias podrían haber sido mucho más graves. “Esto le pasa a una persona mayor y no lo cuenta”, advirtió Sakina, enfatizando el peligro que representa la alcantarilla en mal estado, que es un punto de paso obligado para los transeúntes.
### Impacto en la vida cotidiana
El accidente ha tenido un impacto significativo en la vida diaria de Sakina. Actualmente, se encuentra en reposo debido a las lesiones, lo que le impide llevar a cabo sus responsabilidades como madre. “Apenas puedo hacerme cargo de los niños”, lamenta, destacando que, sin la ayuda de sus padres, no podría atender a sus hijos. La situación ha sido difícil para ella, ya que debe depender de otros para cuidar de sus pequeños mientras se recupera.
A pesar de la adversidad, Sakina ha expresado su agradecimiento por el trato recibido por parte del personal sanitario y los policías locales que acudieron al lugar del accidente. “El trato ha sido excelente”, comentó, destacando la atención cercana y amable de los profesionales que la asistieron. En particular, mencionó a la enfermera Verónica Guimera Manjón y a otra enfermera llamada Claudia, quienes jugaron un papel crucial en su atención médica.
La joven también agradeció a las trabajadoras de la farmacia, quienes, al ver la ambulancia, salieron rápidamente a ofrecerle agua. Este gesto de solidaridad y apoyo en un momento tan difícil fue muy valorado por Sakina, quien se sintió acompañada y cuidada.
### Llamado a la acción
Consciente de que su experiencia podría haber tenido un desenlace mucho más trágico, Sakina ha decidido hacer un llamado a las autoridades para que tomen medidas y eviten que otros ciudadanos sufran accidentes similares. “Que no le pase a nadie más”, es su mensaje claro y directo, instando a que se realicen las reparaciones necesarias en la infraestructura de la ciudad para garantizar la seguridad de todos.
La situación de la alcantarilla en mal estado no es un caso aislado, y la joven madre espera que su denuncia sirva para crear conciencia sobre la importancia del mantenimiento de las infraestructuras urbanas. La seguridad de los ciudadanos debe ser una prioridad, y es fundamental que las autoridades actúen de manera proactiva para prevenir accidentes que puedan poner en riesgo la vida de las personas.
Este incidente pone de relieve la vulnerabilidad de los ciudadanos ante el descuido en el mantenimiento de las infraestructuras y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades locales. La historia de Sakina es un recordatorio de que, a veces, un simple paseo puede convertirse en un evento desafortunado si no se toman las precauciones adecuadas.