En una manifestación masiva celebrada en Saná, capital de Yemen, miles de simpatizantes de los rebeldes hutíes se reunieron para expresar su apoyo a los palestinos de la Franja de Gaza. Este evento, que tuvo lugar el 2 de mayo de 2025, fue convocado en respuesta a los recientes ataques aéreos de Estados Unidos y el Reino Unido contra posiciones insurgentes en Yemen. La protesta se desarrolló en el corazón de la ciudad, donde los participantes, vestidos con trajes tradicionales, ondeaban rifles AK-47 y dagas, así como banderas palestinas, mientras coreaban consignas como “¡Muerte a Estados Unidos! ¡Muerte a Israel!”.
La manifestación no solo fue un acto de solidaridad con Palestina, sino también una clara declaración de oposición a la intervención militar extranjera en Yemen. Los hutíes, que han estado en conflicto con el gobierno yemení y sus aliados desde 2014, han utilizado esta ocasión para reforzar su narrativa de resistencia contra lo que consideran agresiones externas. La situación en Yemen ha sido crítica durante años, con un conflicto que ha llevado a una de las peores crisis humanitarias del mundo, y la intervención de potencias extranjeras ha complicado aún más el panorama.
### Contexto del Conflicto en Yemen
El conflicto en Yemen se intensificó en 2014 cuando los hutíes, un grupo rebelde chiíta, tomaron el control de la capital, Saná. Desde entonces, el país ha sido escenario de una guerra civil devastadora, que ha involucrado a una coalición liderada por Arabia Saudita y apoyada por Estados Unidos. Esta intervención ha sido criticada por organizaciones internacionales debido a las numerosas violaciones de derechos humanos y la crisis humanitaria que ha provocado.
La situación se ha agravado con el tiempo, y los ataques aéreos han dejado miles de muertos y heridos, así como millones de personas desplazadas. La economía yemení ha colapsado, y la población enfrenta escasez de alimentos, medicinas y servicios básicos. En este contexto, los hutíes han buscado apoyo tanto a nivel nacional como internacional, utilizando la causa palestina como un medio para galvanizar a sus seguidores y legitimar su lucha.
La manifestación en Saná es un reflejo de cómo los conflictos en el Medio Oriente están interconectados. La causa palestina ha sido históricamente un punto de unión para muchos grupos en la región, y los hutíes han aprovechado esta conexión para fortalecer su base de apoyo. La retórica antiestadounidense e antiisraelí resuena profundamente entre los yemeníes, que ven en estos países a los principales responsables de su sufrimiento.
### Reacciones Internacionales y el Futuro del Conflicto
La respuesta internacional a la manifestación ha sido variada. Mientras que algunos países han condenado los ataques aéreos y han expresado su apoyo a la soberanía de Yemen, otros han defendido la intervención militar como un medio necesario para combatir el extremismo. La comunidad internacional se enfrenta a un dilema: por un lado, la necesidad de abordar la crisis humanitaria en Yemen y, por otro, la lucha contra el terrorismo y la inestabilidad en la región.
Los hutíes, por su parte, han utilizado la manifestación como una plataforma para reafirmar su posición en el conflicto. Al vincular su lucha con la causa palestina, buscan no solo apoyo interno, sino también la atención de otros actores regionales que podrían estar dispuestos a respaldar su causa. Esta estrategia podría complicar aún más los esfuerzos de paz en Yemen, ya que los hutíes parecen estar más decididos que nunca a continuar su resistencia contra lo que consideran agresiones externas.
A medida que la situación en Yemen sigue deteriorándose, es probable que veamos más manifestaciones como la de Saná. Los hutíes han demostrado su capacidad para movilizar a grandes multitudes y utilizar la propaganda de manera efectiva. La comunidad internacional, mientras tanto, se enfrenta al desafío de encontrar una solución duradera que aborde tanto la crisis humanitaria como las dinámicas de poder en la región. La interconexión de los conflictos en el Medio Oriente sugiere que la paz en Yemen no puede lograrse sin considerar las tensiones más amplias que afectan a la región, incluida la situación en Palestina.