La reciente resolución del Tribunal Económico-Administrativo Central (TEAC) ha traído consigo un cambio significativo en la forma en que los contribuyentes pueden manejar sus deducciones fiscales relacionadas con la venta de viviendas adquiridas antes de 2013. Este cambio es especialmente relevante para aquellos que han estado lidiando con la carga de una hipoteca y que, al vender su propiedad, deseaban cancelar el préstamo pendiente. A partir de ahora, los propietarios podrán deducir las cantidades destinadas a la cancelación de la hipoteca en su declaración del IRPF, lo que representa una oportunidad para recuperar parte de lo invertido en su vivienda habitual.
### Cambios en la Deducción por Inversión en Vivienda Habitual
Desde la eliminación de la deducción por inversión en vivienda habitual en 2013, muchos propietarios se han sentido desprotegidos en términos fiscales. Sin embargo, la resolución del TEAC aclara que aquellos que compraron su vivienda antes del 1 de enero de 2013 y que ya aplicaron la deducción en su momento, aún pueden beneficiarse de un régimen transitorio. Este régimen permite a los contribuyentes deducir anualmente el 15% de lo pagado por la hipoteca, incluyendo tanto el capital como los intereses, con un límite de 9.040 euros por año. Esto se traduce en una deducción máxima de 1.356 euros anuales.
Hasta ahora, la interpretación de la Agencia Tributaria limitaba la deducción a los pagos realizados hasta el día anterior a la venta de la vivienda. Esto significaba que si un propietario vendía su casa y utilizaba parte del dinero de la venta para cancelar la hipoteca, esa cantidad no podía ser deducida. Por ejemplo, si un contribuyente vendía su vivienda el 1 de junio, solo podía deducir las cuotas pagadas hasta mayo y no podía incluir la cancelación de la hipoteca realizada el mismo día de la venta.
Sin embargo, el TEAC ha determinado que la deducción sí puede aplicarse a las cantidades destinadas a la cancelación del préstamo hipotecario, ya que ambas transacciones —la venta de la casa y la cancelación del préstamo— ocurren simultáneamente, mientras la vivienda sigue siendo considerada como habitual del contribuyente. Este cambio de criterio es un alivio para muchos propietarios que se han visto limitados por las interpretaciones anteriores.
### Implicaciones para los Contribuyentes y Revisión de Declaraciones
La resolución del TEAC no solo afecta a futuros contribuyentes, sino que también abre la puerta a la revisión de declaraciones de años anteriores. La plataforma de asesoría fiscal TaxDown ha señalado que, dado que la resolución es de octubre de 2025, los contribuyentes pueden revisar los ejercicios no prescritos, es decir, 2021, 2022, 2023 y 2024. Esto significa que aquellos que hayan vendido su vivienda y cancelado su hipoteca en esos años pueden solicitar una rectificación de su declaración del IRPF y, potencialmente, recibir una devolución si la Agencia Tributaria limitó su deducción o no incluyó la cancelación de la hipoteca.
TaxDown estima que este nuevo criterio podría resultar en devoluciones adicionales de más de 1.000 euros para quienes vendieron su vivienda y cancelaron su hipoteca en los últimos ejercicios. Este cambio es visto como una corrección a años de interpretaciones demasiado rígidas que han perjudicado a muchos contribuyentes.
En 2023, se registraron 2,71 millones de contribuyentes que se beneficiaron de la deducción por inversión en vivienda habitual, lo que representa un total de 1.953,2 millones de euros en deducciones. De esta cantidad, 971,3 millones corresponden a la parte estatal y 981,9 millones a la parte autonómica. Este contexto muestra la relevancia de la deducción y el impacto que puede tener en la economía de los hogares españoles.
La reciente resolución del TEAC no solo ofrece una nueva perspectiva sobre la deducción por inversión en vivienda habitual, sino que también representa un cambio en la forma en que la administración tributaria aborda las situaciones de los contribuyentes. Este cambio puede ser un alivio significativo para aquellos que han estado lidiando con la carga de una hipoteca y que, al vender su propiedad, deseaban cancelar el préstamo pendiente. La posibilidad de deducir las cantidades destinadas a la cancelación de la hipoteca puede suponer un respiro financiero para muchos, permitiéndoles recuperar parte de lo que han invertido en su vivienda habitual.