Nvidia, el gigante estadounidense de los microprocesadores, ha presentado resultados financieros impresionantes para su segundo trimestre fiscal, que abarca desde mayo hasta julio. La compañía reportó un beneficio neto de 26.422 millones de dólares (22.696 millones de euros), lo que representa un aumento del 59,2% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este crecimiento se produce en un contexto donde las expectativas de los inversores eran extremadamente altas, lo que llevó a una caída en el valor de sus acciones en el mercado after hours tras la publicación de los resultados.
Durante este trimestre, los ingresos de Nvidia alcanzaron los 46.743 millones de dólares (40.152 millones de euros), lo que equivale a un incremento del 55,6% respecto al año anterior y un crecimiento del 6% en comparación con los primeros tres meses del ejercicio. Este desempeño se debe en gran parte al notable crecimiento en su sector de centros de datos, que creció un 56% interanual, generando ingresos de 41.100 millones de dólares (35.304 millones de euros). Además, el área de juegos e inteligencia artificial (IA) para PC también tuvo un rendimiento sobresaliente, con ingresos récord de 4.300 millones de dólares (3.694 millones de euros), un 49% más que en el mismo periodo del año anterior.
Sin embargo, a pesar de estos resultados positivos, Nvidia se enfrenta a desafíos significativos en el mercado chino. La compañía no registró ventas de sus microchips avanzados H2O a clientes en China durante el segundo trimestre y ha advertido que no se anticipan envíos de estos microprocesadores para IA al país asiático en el próximo trimestre. Esta situación se produce en un contexto de creciente tensión entre Estados Unidos y China, donde las restricciones comerciales han llevado a Nvidia a buscar alternativas para mantener su presencia en el mercado.
A pesar de las dificultades en China, Nvidia ha tomado medidas proactivas para fortalecer su posición financiera. La compañía anunció que, al cierre del segundo trimestre, contaba con 14.700 millones de dólares (12.627 millones de euros) disponibles bajo su autorización de recompra de acciones. Además, el consejo de administración aprobó una nueva autorización de recompra de acciones por un valor adicional de 60.000 millones de dólares (51.539 millones de euros), sin fecha de vencimiento. Estas acciones reflejan la confianza de la compañía en su modelo de negocio y su compromiso con la creación de valor para los accionistas.
En el primer semestre de su año fiscal, Nvidia reportó un beneficio neto acumulado de 45.197 millones de dólares (38.824 millones de euros), lo que representa un aumento del 43,6% en comparación con el año anterior. Los ingresos totales alcanzaron los 90.805 millones de dólares (78.000 millones de euros), un impresionante incremento del 61,9%. Jensen Huang, fundador y CEO de Nvidia, destacó la importancia de su nueva plataforma de IA, Blackwell, afirmando que representa un salto generacional en la tecnología. La producción de Blackwell Ultra está en pleno auge, y la demanda es extraordinaria, lo que sugiere un futuro brillante para la compañía.
En cuanto a las proyecciones para el tercer trimestre, Nvidia anticipa ingresos de aproximadamente 54.000 millones de dólares (46.385 millones de euros), con una desviación del 2%. Esta previsión se basa en la suposición de que no se realizarán envíos de microprocesadores H2O a China, lo que podría afectar su desempeño en el mercado.
Por otro lado, Nvidia ha llegado a un acuerdo con la Administración de Donald Trump que le permitirá reanudar sus ventas en China a cambio de un 15% de sus ingresos por la venta de microprocesadores avanzados en el país. Esta decisión refleja la complejidad del entorno comercial actual y la necesidad de las empresas de adaptarse a las regulaciones cambiantes. Mientras tanto, las autoridades chinas han instado a las empresas locales a reemplazar los chips de Nvidia con alternativas nacionales, como los productos de Cambricon Technologies, que han reportado un crecimiento impresionante en sus ingresos operativos.
Cambricon ha registrado un aumento del 4.000% en sus ingresos operativos durante el primer semestre del año, alcanzando 2.880 millones de yuanes (346 millones de euros). Su beneficio neto también ha crecido, alcanzando 1.037 millones de yuanes (124 millones de euros), en contraste con las pérdidas del año anterior. Este crecimiento resalta cómo las empresas chinas están buscando alternativas locales ante las restricciones impuestas por Estados Unidos, lo que podría representar un desafío adicional para Nvidia en el futuro.
En resumen, Nvidia continúa mostrando un crecimiento robusto a pesar de los desafíos en el mercado chino y las tensiones comerciales. Su capacidad para adaptarse y buscar nuevas oportunidades en un entorno cambiante será crucial para su éxito continuo en la industria de la tecnología.