La logística urbana se enfrenta a un desafío sin precedentes en la actualidad, donde la sostenibilidad y la eficiencia son más que una necesidad; son una obligación. En este contexto, Grupo Pascual, a través de su distribuidora Qualianza, ha decidido dar un paso adelante en la implementación de un nuevo modelo de distribución urbana en Málaga, que promete transformar la manera en que se realizan las entregas en el centro de la ciudad. Este cambio no solo responde a las exigencias del marco legislativo actual, sino que también busca adaptarse a las nuevas realidades medioambientales y sociales.
### Un Nuevo Enfoque en la Distribución Urbana
La distribución urbana de mercancías (DUM) ha sido históricamente un reto para las grandes ciudades. Las restricciones de tráfico, el colapso en las zonas de carga y descarga, y el elevado coste de operar vehículos de gran tamaño son solo algunos de los problemas que enfrentan las empresas de logística. Javier Gordillo García, responsable nacional de distribución capilar de Grupo Pascual, ha señalado que la clave para superar estos obstáculos radica en la innovación constante y en la adaptación a las nuevas necesidades del mercado.
Con la reciente implementación de las zonas de bajas emisiones (ZBE) en Málaga, la necesidad de un modelo de distribución más sostenible se ha vuelto más urgente. A partir del 30 de noviembre de 2024, la nueva normativa que regula el acceso a estas áreas comenzará a aplicarse, aunque las sanciones por incumplimiento no entrarán en vigor hasta diciembre de 2025. Esto significa que las empresas tienen un tiempo limitado para adaptarse a las nuevas regulaciones y evitar multas.
Para abordar estos desafíos, Grupo Pascual ha decidido implementar un sistema de reparto basado en motocicletas de alta capacidad, operadas por el socio logístico Tatoma. Este modelo ha demostrado ser efectivo en otras ciudades como Barcelona y Valencia, donde se ha logrado una productividad notable, con hasta 35 clientes atendidos por cada repartidor en moto. La idea es que este sistema no solo reduzca el número de furgonetas en el centro urbano, sino que también optimice los costes operativos y mejore la eficiencia del servicio.
### Colaboración y Sostenibilidad: Claves para el Futuro
Gordillo ha enfatizado que el futuro de la distribución no solo depende de la innovación tecnológica, sino también de la colaboración entre las empresas del sector. Propone un modelo de cooperación similar al que se utiliza en la industria farmacéutica, donde competidores se unen para crear operadores logísticos comunes. Esta estrategia permitiría maximizar la carga y reducir el número de vehículos en circulación, lo que a su vez contribuiría a descongestionar las ciudades y mejorar la movilidad.
La propuesta de Gordillo se basa en la idea de que, aunque cada empresa mantenga su estrategia comercial y su competitividad, pueden beneficiarse de un mismo centro de distribución. Esto no solo reduciría costes, sino que también permitiría a las empresas cumplir con las normativas medioambientales de manera más efectiva. Sin embargo, para que este modelo funcione, es fundamental contar con el apoyo de asociaciones y organismos que faciliten la creación de estas alianzas.
Grupo Pascual ya ha comenzado a establecer contactos con el Ayuntamiento de Málaga y otras administraciones para coordinar la implementación de este nuevo sistema de reparto. La compañía tiene la intención de iniciar operaciones en Málaga con un vehículo, con planes de expandir a una segunda unidad en el primer cuatrimestre de 2026. Aunque no se han revelado cifras exactas de inversión, Gordillo ha indicado que la financiación se realizará de manera progresiva a través de colaboraciones.
La delegación de Qualianza en Málaga es una de las más importantes de la red, ya que no solo atiende a la capital, sino también a otras provincias como Granada y, próximamente, Almería. Esto demuestra el compromiso de Grupo Pascual con la expansión de su modelo de distribución sostenible en toda la región.
La implementación de motocicletas de reparto de hasta 600 kg de capacidad no solo representa un cambio en la logística urbana, sino que también refleja un compromiso con la sostenibilidad. Al reducir el número de vehículos de gran tamaño en las calles, se espera que se minimicen las emisiones de CO2 y se mejore la calidad del aire en las ciudades. Además, este modelo de reparto puede ser más eficiente en términos de tiempo y costes, lo que es beneficioso tanto para la empresa como para los consumidores.
En un mundo donde la sostenibilidad es cada vez más importante, la iniciativa de Grupo Pascual en Málaga podría servir como un modelo a seguir para otras ciudades y empresas. La combinación de innovación, colaboración y un enfoque en la sostenibilidad podría ser la clave para resolver los problemas de distribución urbana que enfrentan muchas ciudades hoy en día. La experiencia de Grupo Pascual en otras ciudades y su disposición a adaptarse a las nuevas normativas son indicativos de un futuro prometedor para la logística urbana en Málaga y más allá.
